Desde Espacio Confluére os deseamos unos días llenos de calidez y armonía en compañía de vuestros seres queridos.
Que disfrutemos y nos nutramos con nuestros vínculos más sanos y que, con aquellos más complicados, seamos capaces de aparcar por un momento, las diferencias, y centrarnos en cuidar de todo aquello que, pese a las dificultades, nos une. Todo aquello que nutre y mantiene vivos nuestros vínculos. Todo aquello que los dota de sentido. Todo aquello que impide que perezcan.
La generación y sostenimiento de estos espacios de cuidado y reconocimiento mutuo, más allá de las diferencias, permite, – siempre que así lo decidamos-, mantener vivas nuestras relaciones más difíciles. No hablo de esas relaciones a las que estamos apegados y de las que, aunque nos dañen, nos cuesta desprendernos. Aquí el trabajo será inverso: soltar y cerrar ciclos. No. No hablo ahora de estas relaciones que nos lastran. Hablo de ese pequeño puñado de vínculos a los que, por más difíciles que sean, no estamos dispuestos a renunciar y que muy probablemente, justo por ello, estén llamados a transformarnos.
No propongo acumular resentimientos y silencios autoimpuestos. Propongo hacer un espacio a estos vínculos, suspendiendo los juicios, las creencias, las interpretaciones, las historias que generaron la distancia. Limpiar en lo posible nuestra mirada para relacionarnos desde el no juicio y renunciando a la mutua culpabilización.
Soy consciente de lo arduo de la tarea, sin embargo ello dota de oxígeno a las relaciones más intrincadas y posibilita que quizá algún día, – no importa cuándo-, seamos capaces de afrontar con sumo cuidado todas esas conversaciones pendientes desde el respeto a quienes cada una, cada uno somos y la libertad de co-construir en equilibrio cada uno de nuestros espacios relacionales.
Hay una frase de Rumi que me inspira profundamente en mi vida personal y profesional y que describe de forma sublime el espacio al que me refiero:
«Muy cerca.
Más allá del pensamiento.
Más allá de los conceptos de lo bueno y lo malo, hay un campo.
Allí me encontraré contigo»
Cultivemos ese espacio que permite el encuentro.
¡Por una Navidad de encuentros!
¡Por un 2020 de Abundancia, Gratitud y Paz!
¡¡Felices Fiestas!!
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Inmaculada Gabaldón Gabaldón
Abogada. Mediadora. Formadora
Coach Ontológica y Generativa. Trainer y Coach PNL
Instructora y facilitadora de Prácticas Restaurativas.
Directora de Espacio CONFLUERE
