Post recuperado 11 de abril de 2017
En las pasadas semanas he tenido la oportunidad de introducir el PARADIGMA RESTAURATIVO en una comunidad educativa de Valencia.
Ha sido una grata experiencia comprobar cómo todos los miembros del claustro de profesores se mostraron sumamente participativos, así como apreciar el gran interés mostrado por conocer, primero, e introducir, después, todo el espectro de las Práticas Restaurativas en sus respectivas aulas .
Fueron su compromiso e impliación los que posibilitaron que, de nuevo, los CIRCULOS RESTARATIVOS mostraran su gran poder para abrir mentes y corazones en igual medida, generando espacios de diálogo y respeto desde la autenticidad.
Este es, sin duda, el caldo de cultivo que propicia un auténtico compartir en nuestras relaciones. Compartir coincidencias, pero, también, comparitr diferencias desde la curiosidad de comprender al Otro y la aspiración de conformar una Comunidad plural mediante la integraión de cada uno de sus diversos miembros.
Juntos, comprobamos de nuevo, que las Práctias Restaurativas son sencillas, pero no fáciles y es justo esta sencillez la que puede esconder su gran poder si no se es capaz de suspender el prematuro jucio de inocuidad que pueda desprenderse a priori de esta aparente simplicidad.
Un poder suave y discreto y, sin embargo, implacable, al igual que la gota de agua que cayendo en la férrea roca apenas la baña con su roce y, no obstante, sabemos del poder de esta gota de agua, que le permite erosionar, moldear e, incluso, perforar la aparente invulnerabilidad de la roca.
De nuevo el mismo aprendizaje: no es preciso usar la fuerza para neutralizar la fuerza. La violencia engendra tan solo, violencia.
Son la flexibilidad, ductibilidad, versatilidad, suavidad y fluidez,- aplicadas con dirección y determinación-, las que pueden ser, a la postre, más poderosas y efectivas.
Y así, – justo de esta manera-, las Prácticas Restaurativas tienen el poder de cambiar, -lenta, pero efectiva e indefectiblemente-, la cultura de empresas, familias, instituciones, organizaciones y, en suma, cualquier tipo de comunidades humanas, facilitando la creación de entornos en los que, -desde la confianza que genera la fortalea de los vínculos auténticos e incondicionales-, cada miembro pueda aportar lo mejor de sí a la Comunidad, para su mayor crecimiento y riqueza.
¡¡GRACIAS POR ESTA NUEVA OPORTUNIDAD!!
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Inmaculada Gabaldón Gabaldón
Abogada. Mediadora. Formadora
Coach Ontológica y Generativa. Trainer y Coach PNL
Instructora y facilitadora de Prácticaas Restaurativas.
Direcotra de MediAcción
